Portuarios en la final de la Liga Élite del Béisbol Cubano. Foto: Roberto Morejón Rodríguez / JIT.

El séptimo capítulo del sexto partido entre Portuarios y Centrales en la semifinal de la

Liga Élite del Béisbol Cubano

(LEBC) pasará a la historia como uno de los más felices para la afición industrialista-mayabequense, así como también uno de los peores jugados por la defensa y el pitcheo del equipo Centrales, amplio favorito en este play off, que terminará con un bronce agrio para sus seguidores matanceros, cienfuegueros y villaclareños.

El partido en el estadio Victoria de Girón parecía enrumbarse a una definición en un séptimo cotejo, pues los anfitriones dominaban fácil la pizarra 8-1 hasta ese fatal capítulo de desenlace, mejor que nunca llamado “

inning

de la suerte”, donde los muchachos de Michael González pegaron siete sencillos, combinado con

fly

que se caen pudiendo ser fildeados y lanzadores efectivos (Hermes González y Naykel Cruz) que no pudieron sacar un out frente a cinco bateadores, entre otras pifias que van a estadísticas en papeles o mentales.

Los dos primeros tercios de los Centrales habían sido una panacea para ellos y un dolor de cabeza para el mentor de los Portuarios, con un desfile de lanzadores (Pavel Hernández, Marcos Ortega y Pedro Álvarez) que solo pudieron sacar un cero en la pizarra (en la cuarta) hasta que Elder Nodal y Andy Vargas metieron en cintura a los maderos contrarios.

La trascendental remontada de ¡ocho carreras! quedará ya en los archivos como la más sorpresiva de este certamen, que desde ya apunta al equipo Portuarios como el mayor animador dentro de los seis que arrancaron, pase lo que pase en la final frente a Agricultores, conjunto que vuelve a salir con las mayores credenciales de éxito para obtener el boleto a la Serie del Caribe.

En este cierre semifinal, Alexander Pozo (4-3), Dennis Laza (5-3 con dos impulsada) y Rangel Ramos (5-3 con un remolque) llevaron la voz cantante con el madero, sin olvidar a Yasiel Santoya (con dos empujadas); en tanto muchos critican al mentor Armando Ferrer por sacar a su abridor Yoanni Yera en el quinto episodio, pero tras un regreso de la Liga del Pacifico de México y con un marcador 7-1 era lo correcto, sobre todo con un bullpen profundo y eficiente hasta este 11 de enero.

Portuarios tiene un plus que agradecemos todos los que queremos un béisbol de más espectáculo y calidad. Han remontado su accionar a partir de mejorar todos los indicadores de juego, pero sobre todo, desde un nivel motivacional muy alto, guiados por un director como Michael González, que deberá aprender mucho de táctica o estrategias, pero en lo que respecta a mover resortes anímicos en sus peloteros tiene 100 puntos, tal y como lo hizo con Mayabeque en la Serie Nacional, cuando la clasificó por vez primera a una postemporada.

La primera final de la LEBC comenzará este sábado en el estadio Mártires de Barbados, de Bayamo, cuartel general de unos Agricultores, que barrieron a los Tabacaleros sin grandes tormentos y esperan ansiosos por estos Portuarios, inspirados, combativos y listos para brindar el espectáculo deseado a un torneo necesario, pero imperfecto en el arraigo al aficionado todavía.