Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate

En el décimo período ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en su novena legislatura, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel rindió cuenta de su gestión en 2022, “un año extremadamente complicado en el escenario internacional”. 

Destacó que asume este mecanismo con responsabilidad y con la convicción de su importancia para el fortalecimiento de la institucionalidad.

La rendición de cuenta, a todos los niveles, es un mecanismo que debemos perfeccionar, sistematizar y desarrollar con rigor ante el pueblo, con transparencia y como una vía para superarnos y perfeccionar la labor de dirección en busca de resultados de mayor impacto en la sociedad, dijo en el Palacio de Convenciones de La Habana. 

“Acepto esta responsabilidad con compromiso y entrega”, indicó y agregó que lo hace protegiendo la unidad y asumiendo la continuidad desde una perspectiva dialéctica. En defensa de la Revolución y de su rumbo en el camino de la construcción socialista.

El presidente rindió cuenta refiriéndose al contexto en que ha vivido Cuba y su política exterior, y valoró las situaciones por las que ha transitado el país y de las cuales, dijo, se siente el principal responsable.

Díaz-Canel mencionó los desafíos y adversidades que nos han impedido avanzar como nos propusimos. “Espero que nadie los reciba como justificación”, dijo y agregó que “ha sido un año marcadamente complicado en el escenario internacional, que sucede a dos años también extremadamente complicados”.

Estamos convencidos de la importancia de la integración

“El conflicto militar en Europa ha generado nuevos problemas y agradado mucho de los ya existentes en un mundo castigado por crecientes desigualdades, con la ausencia de un compromiso real para hacer frente a las amenazas contra el medioambiente, por los efectos socioeconómicos y sanitarios presentes de la pandemia de COVID-19 y sus consecuencias para los precios de los alimentos y las medicinas, el transporte, la logística y los requerimientos esenciales de los países en desarrollo”, comentó.

El presidente insistió en que “es un escenario amenazado, además por el nocivo empeño imperialista de pretender dividir al mundo y generar exclusiones y estigmatizaciones”, a lo que se suma “la tendencia a abusar del desproporcionado poder económico y financiero de los Estados Unidos para aplicar la coerción económica como instrumento preferido de política exterior”. 

De acuerdo con el mandatario, en el año que culmina avanzamos en las relaciones con nuestra región, donde -dijo- “los cambios experimentados posibilitaron la llegada al gobierno de fuerzas políticas comprometidas con proyectos orientados a la justicia social y la defensa de la soberanía”.

Ratificó que “estamos convencidos de la importancia de la integración y de la defensa de una región de paz unida y solidaria”.

Señaló, asimismo, que la región continúa marcada por niveles alarmantes de pobreza, desempleo, desigualdad y exclusión, que “a la larga favorecen el ascenso de fuerzas políticas de extrema derecha y corte fascista, que intentan detener el avance de los movimientos progresistas comprometidos con los intereses y necesidades de las mayorías”.

En referencia a la pasada Cumbre de las Américas, manifestó que “el evento continental y excluyente que depende de Estados Unidos en la ciudad de Los Ángeles, terminó siendo un fracaso político y una demostración del aislamiento que sufre la política imperialista de ese país en la región que José Martí llamó nuestra América”. 

“Constituyó un duro golpe a la OEA y su dirigencia institucional actual, cuyo desprestigio no tiene comparación”, subrayó, y reiteró el reconocimiento a los países que rechazaron la exclusión de Cuba de ese evento. “Lo denunciaron y además condenaron la política de bloqueo recrudecida”, dijo.

Ha sido un año de importantes acontecimientos en el ejercicio de la política exterior cubana

El presidente destacó que ha sido un año de importantes acontecimientos en el ejercicio de la política exterior cubana, “lo que ha exigido constancia, pensamiento y riguroso accionar apegado a los principios y tradiciones de la política exterior de nuestra Revolución”.

Resaltó que se mantuvo la estrecha concertación política y cooperación con la hermana República Bolivariana de Venezuela, y reiteró el agradecimiento a ese país por su apoyo en el enfrentamiento a los desastres naturales y accidentes que sufrió Cuba este año.

Igualmente, añadió, Cuba consolidó las relaciones con México, lo que fue ratificado con la visita de su presidente Andrés Manuel López Obrador al país, a quien también agradeció por su solidaridad ante los eventos que vivió la Isla.  

Díaz-Canel reiteró la solidaridad con el Estado Plurinacional de Bolivia y su presidente, Luis Arce, frente a los intentos de desestabilización promovidos y orquestados por fuerzas de derechas, al tiempo que saludó al comandante Daniel Ortega Saavedra y al pueblo de Nicaragua.

Comentó que fueron identificadas áreas de cooperación, de beneficio mutuo, con la Argentina, mientras se contribuyó a la reanudación de los esfuerzos de paz en Colombia y se mantuvo la disposición a continuar como garantes de la mesa de diálogo.

El bloqueo sigue siendo el obstáculo fundamental para el desempeño de nuestra economía

En el caso de los Estados Unidos, la característica fundamental y definitoria del vínculo bilateral -dijo- continúa siendo el bloqueo económico, “como arma de coerción, cruel, ilegítima e inmoral” que “constituye el obstáculo fundamental para el desempeño de nuestra economía”, acotó.

Denunció que es evidente la abierta política de subvenciones y los intentos de desestabilizar al país promovidos desde EE.UU.. “Con el respaldo de decenas de millones de dólares del presupuesto federal, junto a la tolerancia, frente a quienes desde territorio de los Estados Unidos orientan, financia y hasta entrenó a individuos para que cometan actos violentos contra Cuba”.

El presidente cubano recordó que todas estas situaciones han sido denunciadas directamente por los canales diplomáticos y de forma pública, y señaló que hace pocos días, el Gobierno de EE.UU. dio muestra de la conducta deshonesta de su política exterior, al designar a Cuba como un país en el que supuestamente se persigue la religiosidad.

“Se trata de una falsedad más de un Gobierno que no encuentra justificación para cumplir con el sistema de medidas económicas coercitivas más abarcador aplicado contra un Estado”, dijo, y manifestó que, no obstante, “se han dado pasos muy discretos, dirigidos a encaminar la cooperación bilateral para el cumplimiento de los acuerdos migratorios y también en otras áreas de prioridad entre ambos países”.

Cuando ocurrió el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas el Gobierno estadounidense ofreció asesoría técnica, recordó el presidente, y agregó que esta iniciativa fue agradecida y aceptada.

También aceptamos -dijo- el ofrecimiento de unos 100 trajes de bomberos con el correspondiente equipamiento de protección, que llegaron al país la semana pasada y se están distribuyendo entre las brigadas del cuerpo de bomberos.

De igual modo, el Gobierno norteamericano ofreció ayuda material, valorada en dos millones de dólares, con motivo del huracán de Pinar del Río en septiembre pasado. “Al igual que con el caso de Matanzas, fue ofrecida sin condicionamientos, por lo que también la agradecimos, y aceptamos”.

“Nuestro objetivo sigue siendo promover lazos más amplios con ese país y su pueblo, que incluye ya cerca de dos millones de personas de origen cubano o descendientes de ellas”, señaló.

Añadió que el Gobierno de Cuba mantiene la disposición de construir una relación respetuosa y mutuamente beneficiosa, con pleno apego al Derecho Internacional y las prerrogativas soberanas de cada país. “Esto lo conoce el Gobierno de Estados Unidos y se lo hemos expresado directa y públicamente”.

Los países de Caricom se consolidan

Afirmó que los vínculos con los países de Caricom se consolidan, cuando se cumplen los 50 años del establecimiento de las relaciones diplomáticas con Barbados, Guyana, Jamaica y Trinidad y Tobago, en momentos de mayor aislamiento promovido por el imperialismo contra Cuba.

Comentó que durante la reciente gira por los países del Caribe reafirmó la vigencia del legado del Comandante en Jefe, continuado por el General de Ejército, en las relaciones con el Caribe, “que se basa en la hermandad, la cooperación y el respeto”, así como destacó la voluntad común de avanzar en planes de integración y desarrollo.

“La Comunidad del Caribe ratificó su apoyo al reclamo por el levantamiento del bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba, así como la eliminación del país del espuria lista de Estados patrocinadores del terrorismo”, agradeció.

Reiteró, asimismo, la solidaridad con el hermano pueblo puertorriqueño y su derecho a la autodeterminación. “Nos animan los procesos políticos que se inician en Brasil, Colombia y Honduras. Nuestra región reclamó independencia y justicia social”.

Se refuerza la los lazos con Argelia, Rusia, Turquía y China

Se refirió a las recientes visitas a Argelia, Rusia, Turquía y China, que respondieron a invitaciones cursadas por sus gobiernos, y al interés de promover y consolidar lazos con esos países, tanto políticos como económicos comerciales.

De igual forma, consideró trascendentales los resultados en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde la comunidad internacional volvió a pronunciarse casi unánimemente en rechazo al bloqueo económico de los Estados Unidos calificando esta política como cruel o injusta.

“Estamos muy conscientes de la naturaleza polarizada y la agenda de la política estadounidense, que puede ayudar a que el bloqueo económico se prolongue por muchos años más”dijo, y agregó que “es por ello de máxima prioridad aunar los esfuerzos y la creatividad popular en función de resolver los más agudos problemas que enfrentamos, las limitaciones, y encauzar el rumbo del desarrollo”.

“También asumimos la responsabilidad de denunciar esa política cruel e inhumana en cada oportunidad y cada escenario”, insistió el presidente.

La próxima legislatura le corresponderá igualmente enfrentar un alto trabajo legislativo

El presidente hizo referencia al amplio ejercicio legislativo que ha sido favorecido para que, en el menor tiempo posible, se promulgue las leyes que desarrollan la Constitución.

Resaltó la aprobación del nuevo Código de las Familias después de una amplia consulta popular y referendo, ejercicio que constituyó una evidencia más del carácter democrático del sistema socialista cubano y del amplio consenso social alrededor de temas muy complejos y diversos.

Otro de los momentos destacados por el presidente fueron las recientes elecciones para delegados a las asambleas municipales del Poder Popular, y la aprobación en esta sesión del Parlamento de cuatro leyes con un papel determinante en el ámbito económico y social de la nación.

Para la próxima legislatura, dijo, le corresponderá igualmente “enfrentar un alto trabajo legislativo y conformar, desde sus inicios, un nuevo cronograma que dé respuesta a nuestra demanda normativa”.

A su juicio, estas sesiones de la Asamblea han sido intensas para abordar los problemas de la difícil cotidianidad cubana.

La economía cubana transita por una compleja situación

Reiteró que la economía cubana transita por una compleja situación, por el efecto combinado del recrudecimiento del bloqueo, la pandemia y la inflación internacional, entre otros factores adversos.

De cara al 2023, manifestó que es importante innovar y romper el cerco, y que en el plan de la economía se definen objetivos que resultan de vital importancia para enfrentar todas las problemáticas ya diagnosticadas de la economía nacional, así como para continuar avanzando en la creación de capacidades y entornos institucionales que permitan progresar con mayor efectividad y rapidez.

“Las medidas aprobadas con ese fin deben crear las condiciones para avanzar con mayor dinamismo si se implementan con celeridad, sin frenos, siempre identificando los riesgos para minimizar sus impactos”, señaló.

Dijo que en los últimos años se han producido “importantes desequilibrios macroeconómicos”, como resultado de la pérdida de ingresos en divisas, los elevados déficits fiscales, el incremento de los ingresos de personas naturales sin respaldo productivo, la parcial dolarización de la economía y la poca respuesta productiva para generar la oferta de bienes y servicios, entre otros.

Estos desequilibrios, amplió, se expresan principalmente en los niveles de inflación, escasez de oferta, depreciación e inconvertibilidad de la moneda nacional, “fenómenos que han producido un deterioro sustancial del poder adquisitivo de los ingresos de los trabajadores y pensionados y de las condiciones de vida de la población”.

Señaló que la mejora del bienestar del pueblo requiere reactivar las capacidades productivas nacionales y captar un nivel de divisas que garanticen el incremento gradual pero sostenido de las ofertas de bienes y servicios.