En la industria espirituana se fabrican productos únicos de su tipo en el país. Foto: Dayamis Sotolongo/Escambray.

Para imponerse a las limitaciones económicas que atraviesa el país, acentuadas por el recrudecimiento del bloqueo, la refinería de petróleo Sergio Soto, enclavada en Cabaiguán, Sancti Spíritus, ha buscado una fórmula poco común: acudir al ingenio colectivo para diversificar sus producciones.

De esa apuesta a no quedarse de brazos cruzados han comenzado a fabricarse aquí noveles productos como los asfaltos diluidos —nunca antes producidos en la planta espirituana—, de ahí que, en conjunto con el Centro de Investigaciones del Petróleo, se hiciera el asfalto frío RC-2 utilizado para las labores de bacheo que se acometen en las carreteras de toda la isla.

Asimismo, según explicó a Escambray Mijail Bonachea Crespo, máster en Eficiencia Energética y director general de la entidad, con el crudo extraído en los yacimientos de Pina, Majagua y Jatibonico, que usualmente se utiliza en la fabricación de los aceites eléctricos para los transformadores hasta 13.5 kV ya se halla en fase de prueba un aceite para aplicarlo en los de 33 kV.

Lo más importante, acaso, en todo ese proceso fabril han sido las modificaciones tecnológicas acometidas. De ese modo lo reconocía Bonachea Crespo: “Gracias a esas transformaciones cuando un tanque se lograba producir en una semana ahora ya lo hacemos en cuatro o cinco horas. También se hicieron facilidades para poder trasladar los productos por ferrocarril hasta las provincias más lejanas, que hace tres veces el volumen de una paila y facilita la comercialización.

“En saludo al Día del Trabajador del Petróleo estaremos cargando el primer carro tanque por ferrocarril de asfalto frío”, aseguró.

Aun cuando han existido limitaciones se ha logrado, al decir del directivo, aumentar la refinación a partir de la producción de los yacimientos espirituanos y de esa forma brindar una inyección de diésel a la provincia con la producción de la planta cabaiguanense.

Para minimizar en lo posible las afectaciones se han buscado varias soluciones como cargar el aceite en paila ante la escasez de presupuesto para reparar los bidones y la creación de un cagadero en pos de facilitar la comercialización.

Entre las modificaciones tecnológicas sobresalen el mejoramiento al tratamiento del crudo, el acortamiento del tiempo en la producción de las mezclas de los asfaltos diluidos, la reparación capital de los tanques, las transformaciones en el proceso de la producción de aceite en cuanto a los porcientos de aditivación de mezcla para mejorar la calidad y nuevas instalaciones en la parte de automática.

En tal ambiente creativo las actividades para celebrar el Día del Trabajador del Petróleo van desde el agasajo a los fundadores y los jubilados, el reconocimiento a los obreros más destacados, el rescate de la historia de la industria hasta la preparación con la fuerza propia de jóvenes calificados para insertarse en la institución y la mejora de la calidad de vida de los trabajadores.

(Tomado de Escambray)