Me llamó mucho la atención cuando un amigo nos mandó la revista Bohemia en PDF desde 1910 hasta 2010, donde aparecía la sección de cocina “El menú de la semana”, a nombre de Adriana Loredo.

Por mucho que indagué, nadie conocía a la autora de dicha columna. Pero en verdad era muy difícil trabajar con páginas tan dispersas. Por suerte, la Editorial Oriente anunció en su catálogo para la recién finalizada Feria del Libro el título Páginas muy bien condimentadas, compilado por la ensayista María Antonia Borroto Trujillo, que recoge las columnas de la Loredo entre 1946 y 1960.

Me puse en función de un ejemplar. Aunque no pocos tropiezos para conseguirlo, lo obtuve gracias a las trabajadoras del Centro del Libro y la Literatura de Holguín, y al final del día obtuve un ejemplar más que me había reservado la Editorial Oriente.

Mediante María Antonia me entero que Adriana Loredo era un seudónimo que empleaba Rosa Hilda Zell para la sección. Dice María Antonia: “no es solo una mujer que cocina bien, es una mujer de la cultura y una notable periodista”.

…Tras varios años fuera del periodismo, a su regreso, indaga qué realidad cubana no había encontrado todavía eco en nuestra prensa… No tardé en saberlo. Bajo el imperio de la Bolsa Negra, en medio del caos de los abastecimientos que provocaba la Segunda Guerra Mundial, las amas de casa no tenían sección de cocina que las ayudara a resolver “la situación”.

Adriana Loredo había estudiado Economía Doméstica y tenía una formación avalada por la práctica hogareña. Decía: “Ni la falta de carne, ni la de arroz, ni otras, ninguna quitó de nuestra mesa un elemento nutricional: yo sabía cuáles eran los sustitutos que tenía en el mercado, y cómo presentarlo. Mis amigas me pedían recetas y menús constantemente”. Y concluyó que “lo que era útil para mis amigas, lo sería también para el resto de las amas de casa”.

Dice Ana Núñez Machín, según refiere Ana María, que Rosa Hilda Zell después del triunfo de la revolución de 1959, redactó la sección culinaria de Noticias de Hoy y Hoy Domingo (1961-1963). En 1964 publicó en el periódico El Mundo una sección titulada “En onda” donde trata de cocina y otros asuntos.

El primer “Menú de la semana” apareció el 7 de agosto de 1946 con receta de sopa de maíz tierno, pescado a la victoria, plátanos a la vinagreta, galleticas de soda con queso crema, mayonesa tropical, puré de papa y malanga, cóctel de frutas frescas y galleticas de chocolate.

Como pueden apreciar, momentos difíciles ha pasado la mujer cubana y siempre ha sabido poner en su mesa algo para alimentar a la familia utilizando como base recetas en las cuales se puede sustituir un elemento por otro y así tener una nueva receta.

Les recomiendo Páginas bien condimentadas, de Adrina Loredo, compilado por Ana María Borroto Trujillo. Es  una lectura amena y con mucha información.

Les propongo estas recetas que espero sean de su agrado: sopa de maíz tierno, plátano a la vinagreta, mayonesa tropical y pollo estofado.

Sopa de maíz tierno

Sopa de maíz tierno. Foto: Estoy hecho un cocinillas.

Ingredientes (4 servicios):

Media taza de maíz tierno rallado, ¼ taza de puré de tomate, 5 tazas de agua, 2 cebollas medianas, 2 perros caliente, 1 ají pimiento, 5 granos de pimienta, sal, jugo de limón y mostaza a gusto.

Preparación:

Limpie, lave y pique en cuatro el ají. Limpie la cebolla. Pique los perros en ruedas a gusto.

Coloque en un tenedor las cebollas y póngalas a asar sin pelar y picar hasta que se pongan negras y el jugo por dentro se sienta que hierve. Sáquelas y con el tenedor póngalas en una cacerola, pártalas en cuatro y póngalas a la candela con el agua, el ají, el puré de tomate, la pimienta, tápelo y déjelo cocinar hasta que se reduzca el líquido a 3 tazas. Lo bajamos y lo colamos con un paño y lo dejamos refrescar.

Luego le agregamos el maíz tierno y lo revolvemos bien y lo volvemos a colar y lo ponemos de nuevo a la candela, le agregamos, las ruedas de perro caliente, el jugo de limón, la mostaza, sal a gusto y lo dejamos a la candela dándole vuelta con una cuchara de madera hasta que tome la consistencia de un puré a su gusto.

Nota: En la receta original se hace con una lata de salchichas. En el caso de la cebolla, se colocan entre las cenizas hasta que se quemen.

Plátano a la vinagreta

Plátano a la vinagreta. Foto: Recetas de Costa Rica.

Ingredientes (4 servicios):

Media taza de vinagre, 2 cucharadas de azúcar, 12 clavos de olor, ½ cucharadita de canela y 4 plátanos de frutas maduros.

Preparación:

Limpie, lave y pique al medio los plátanos. Ponga en una cacerola el vinagre, el azúcar, los clavos y mézclelo. Ponga la cacerola a la candela a cocinar lentamente hasta que el azúcar se diluya y tanga un sirope.

Agregue los plátanos y déjelos cocinar hasta que espese el sirope. Sáquelos y póngalos en una fuente y viértale por encima el sirope.

Mayonesa tropical

Mayonesa. Foto: Trufa y chocolate.

Ingredientes (varios servicios):

Una taza de pulpa de aguacate, 1 yema de huevo, mostaza, vinagre, pimienta y sal a gusto.

Preparación:

Pase la pulpa de aguacate por un colador y póngala en una taza. Bata la yema de huevo y agréguesela a la pulpa de aguacate mezclándola bien, luego añada la sal, la pimienta, la mostaza, el vinagre a gusto y mézclelo todo bien.

Pollo estofado

Pollo estofado. Foto: Cocina casera y fácil.

Ingredientes (4 servicios):

Cuatro muslos de pollo, 1 taza de caldo de pollo o agua, ¼ taza de vinagre, 2 cucharadas de harina, 2 yemas de huevos, 1 cebolla, ½ macito de perejil, pimienta y sal a gusto.

Preparación:

Lave y limpie el pollo. Limpie y pique la cebolla en ruedas finas. Lave y pique el perejil finamente.

Coloque el pollo untado en harina en la olla presión. Agregue el caldo, la cebolla, el perejil, la pimienta y la sal. Ponga la olla 10 minutos con presión. Espere a que pierda la presión. Aparte, bata las yemas de huevo.

Cuando pierda la presión, tome un poco del líquido y mézclelo con las yemas batidas. Si le queda mucho líquido al pollo póngalo de nuevo a la candela sin presión hasta que reduzca el líquido. Bájelo, añádale el batido a la olla, tápela y déjela unos minutos hasta que el huevo se cocine con el calor sin ponerla a la candela.