El comisionado nacional de béisbol y sóftbol Juan Reinaldo Pérez Pardo junto a la periodista Angélica Arce Montero. Foto: Mónica Valero/Cubadebate.

Esta emisión, la sección Punto Deportivo conversa con el comisionado nacional de béisbol y sóftbol, Juan Reinaldo Pérez Pardo, quien se encuentra en la redacción de Cubadebate.

El directivo ofrece sus consideraciones sobre las primeras subseries de la 61 Serie Nacional de Béisbol, la acogida en los diferentes estadios del país, la Serie Selectiva (Élite o Especial, aún sin nombre oficial), la metodología para la elección del director del equipo Cuba y el proceso de selección de jugadores para integrar ese conjunto.

Además, explica la situación de los contratados en el exterior y las razones de que sean nóminas de 40 peloteros, y que no se den altas ni bajas durante la temporada.

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En video, declaraciones del comisionado nacional de béisbol y sóftbol

  • Por su importancia, le dejamos aquí transcripción de la entrevista.

–¿Qué opinión le merece a este incio de la Serie Nacional 61?

–Se ha visto bastante pareja. Se han jugado pocos partidos para dar un vaticinio, pero hasta ahora, se ha desarrollado como se esperaba.

“La tendencia ha sido al alza de varios equipos, que han evidenciado un buen nivel técnico en los últimos años, y se está cumpliendo lo previsto por la comisión técnica.

“Son conjuntos de los que se esperaba su trayectoria como el de Santiago de Cuba. El caso de Mayabeque es también un plantel que viene haciendo un trabajo hace años.

“Además, está conformado por un colectivo de jugadores jóvenes, con mucho talento y están respondiendo el pitcheo y la ofensiva. No nos asombra su desempeño. No quiere decir que se mantenga de líder de la evento, pero sí pensamos que esté por encima de la media, entre los ocho primeros.

“Como te decía, es muy temprano para hacer pronósticos, pero hay un pelotón de avanzada que cierra con Granma, el actual campeón, que está bastante bien. Ha existido predominio de la ofensiva, pero pensamos que según avance la serie, se ajuste el pitcheo”.

Sigue avanzando “a todo spai” en Cuba la Serie Nacional de Béisbol. Foto: Pastor Batista/ Cubadebate.

–¿Cómo valora la incorporación de la afición a los estadios?

–Antes del inicio de la temporada, se realizó un recorrido para valorar la calidad de los estadios del país. Allí comprobamos que todas las provincias, sus gobiernos, partidos, las direcciones de Deportes han puesto empeño para tener una instalación con las condiciones óptimas para jugar béisbol.

“Los estadios han estado engalanados, se han agrandado dugout, mejorado su confort. También se han remozado los clubhouse, las salas de prensa, los locales para la triada médica..., esfuerzos que benefician la calidad de vida de los peloteros.

“En cuanto a la grama, independientemente a la fecha en que estamos jugando, se ha logrado un césped adecuado, con la arcilla necesaria, y algo muy importante, los box cuentan con la altura debida.

“Finalmente, hemos cumplido con los 30 indicadores que requieren los estadios principales”.

Juego inaugural en Granma. Foto: Ismael Francisco/Cubadebate.

–Del llenado de los estadios, ¿qué me puede decir?

–La acogida ha sobrepasado el 50 %. Realmente, el público estaba muy deseoso de que empezara la serie. Es una afición que no traiciona el legado, la tradición, y siente orgullo por la reciente declaración del béisbol como patrimonio cultural de la nación. El béisbol forma parte de la idiosincrasia de nuestro pueblo. El cubano no solo ve la pelota por la televisión, le gusta ir al estadio.

Se ha hecho un esfuerzo grande por el país y el Inder para que se juegue de noche. Puede asistir el público con mayor frecuencia, el estadio queda más bonito.

“De igual manera, los atletas se desgastan menos, y el juego nocturno permite realizar un entrenamiento más adecuado.

Eso lo hemos logrado en la capital. Hoy se siguen haciendo estudios y valoraciones en el resto del país. No nos queremos anticipar, pero sí podemos decir que tenemos el análisis hecho de todos los estadios de Cuba.

“Algunos que ya se han encendido en su totalidad, a otros le faltan pocas lámparas para iluminar. Hemos tratado de reubicar lámparas de un estadio a otro para igualar las condiciones.

“Además, ya se hizo un estudio de factibilidad para comprar luminarias de la tecnología Led. Serían habilitadas en al menos dos estadios. Es decir, existe una intención del país, y esta necesidad está recogida en la estrategia de desarrollo del béisbol cubano.

“Estamos en la fase de implementación, con un ciclo hasta 2024. Por supuesto, la calidad e iluminación de los estadios y que los juegos se puedan realizar nocturnos están entre las pretensiones de la comisión nacional de béisbol. En esto se pensó desde el diseño de la estrategia, aprobada por la dirección del país”.

El federativo Fraccari estuvo en Cuba hasta el 18 de enero. Foto: Ismael Francisco/Cubadebate.

–Desde la visita de Ricardo Fraccari a Cuba, ¿se ha concretado algún proyecto de colaboración?

–Luego de la visita de Fraccari, presidente de la Confederación Mundial de Béisbol y Sóftbol (WBSC), quedamos en concretar los acuerdos, llegar a una firma de términos, al igual que a las preformas de contratos. En eso hemos estado trabajando y se ha avanzado.

“La agenda que se trabajó con la WBSC, fue intencionada por la Federación Cubana de Béisbol (FCB) y el organismo central, Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder). Uno de los temas medulares y que nos interesa es el de la contratación de jugadores.

“Y no solo eso, sino la protección de esos atletas, que tengan una atención como se merece un jugador de alto rendimiento y, a la vez, se considere el derecho de formación que tiene la FCB con nuestros peloteros, y que puedan jugar en las mejores ligas del mundo.

“Esto ha quedado reflejado, recogido y es uno de los programas con los cuales está trabajando la WBSC. Es muy importante que los peloteros, no solo los cubanos sino también los afiliados, así como los clubes, puedan estar protegidos en un registro.

Así podrán estar identificados–donde quiera que jueguen–como atleta federado de la WBSC y, a su vez, estar conectado linealmente con una Confederación o Federación de un país. En nuestro caso, la FCB”.

–¿Qué detalles puede ofrecer la comisión sobre la serie élite o selectiva?

–Desde que se concibió la estrategia para el desarrollo del béisbol cubano, en 2019, quedó por un reclamo de la consulta popular la realización de una liga, de una serie élite o superior, que esté por encima de la Serie Nacional. Es decir, una serie que aglutine atletas de mayor nivel y que sea una 'competencia techo del béisbol cubano'.

“La propuesta está. Hay variantes. Está aprobado en el calendario que sea de octubre de 2022 a enero de 2023. Hasta ahora cada equipo jugará 50 partidos y lo que más hemos hablado es que sea con seis conjuntos.

“No quisiéramos seguir redundando en el tema de la conformación de las selecciones, porque lo hemos tratado en varios momentos. La determinación final debe quedar aprobada en los próximos días.

“Se ha hablado de seis equipos, y una de las variantes ha estado en una selección sub-23 de la nación, por la importancia que tiene esa categoría. Lo vimos en el 2021, con el cuarto lugar en el mundial y el bronce de los panamericanos juveniles.

“Esto demuestra que Cuba tiene una gran potencialidad en esas edades. Incluso, en el mundial y los Panamericanos participaron jugadores que no tenían casi turnos al bate en la Serie Nacional. Eso responde a varios factores.

“Por eso pensamos que en una serie élite pudiera participar una selección sub-23, porque tiene un campeonato nacional, el cual está programado para el mes de julio. Pero, sabemos que esa liga no tendría la calidad suficiente para una puesta en forma del equipo Cuba sub-23, que intervendrá en distintos torneos.

“Cuba participará en una eliminatoria mundialista, en un Panamericano, en México, que todavía no tiene fecha, y que es clasificatorio para una Copa Mundial, que se realizará en China Taipei. Eso es lo que está programado para el mes de noviembre.

“Retomando la selectiva, además del sub-23 se ha manejado la inclusión del equipo campeón de la serie nacional y cuatro conjuntos que deben salir de las regiones”.

El equipo Cuba, categoría sub-23, es una de las variantes. Foto: Boris Luis Cabrera/Cubadebate.

–¿Cómo se escogerán esos equipos?

–En el estudio que tenemos, se ha pensado dividir a Cuba en cuatro zonas como existió anteriormente. Un conjunto representativo que ubique los cuatro equipos de su zona.

“Ahora, la región donde esté el campeón nacional se quedaría solo con tres selecciones. Ese campeón sería reforzado con las otras tres zonas. Esa es una variante.

“También hemos escuchado la opinión pública y la prensa. Se ha sugerido la confección de seis equipos netamente por territorios, por acercamiento geográfico.

“Igualmente, en la estrategia está contemplado potenciar el apadrinamiento o el patrocinio de equipos, a partir de empresas cubanas que tengan intenciones de hacerlo. La comisión nacional elaboraría una bolsa y se elegiría a través de un bombo o un sorteo. Así quedarían repartidos los atletas en los diferentes planteles, siendo seis patrocinados.

“Asimismo, se elegirá un colectivo de dirección destinado a partir de un nombre que tendría el conjunto a representar. Por ejemplo, pudiera ser un organismo o una empresa cubana o también la otra variante por regiones.

“Lo que, vuelvo y repito, solo reitero cosas que hemos dicho. No hay aún una decisión final, en los próximos días la comunicaremos.

“La liga que queremos desarrollar todavía no tiene nombre, no tiene identificados a los equipos, pero lo que tenemos claro es que se realizará”.

–¿Cuál será la metodología para la elección del director del equipo Cuba?

–Se tiende a confundir, cuando dicen que el director del equipo Cuba no puede estar en la Serie Nacional. Lo que hemos dicho es que el mánager de la selección cubana no va a dirigir en el próximo campeonato.

“Ese director debió haber salido en el año 2021, como habíamos hablado en la estrategia. Por todos los contratiempos que hemos sufrido en el calendario competitivo, debido a la situación epidemiológica en Cuba, se hicieron ajustes en la serie nacional y no se comenzó como teníamos programado.

“La estrategia también es flexible. Decidimos no nombrar al director del equipo nacional porque no tenemos eventos competitivos de mayores en 2022. A la vez, nombrar un mentor que salga de los 16 equipos de la serie sería quitarle un director a uno de los conjuntos.

“Somos consecuentes de que, por ejemplo, si le quitamos un director a una provincia, eso afecta. El director tiene que estar identificado en primer lugar con su territorio, municipio, raíces. Estos también responden a los intereses de una provincia.

“Ese director que será seleccionado al terminar la 61, debe salir de los 16 que están en la serie. En cambio, en la metodología de la estrategia está aprobado que el mánager puede salir o no de estos 16, pero ese director tiene que haber dirigido campeonatos nacionales en Cuba, con resultados relevantes, y tener experiencia en ligas internacionales.

“Como dice la estrategia, se ha diseñado un protocolo de evaluación anual de esos directores. La propuesta es que el director sea nombrado para cuatro años, porque nos preparamos para un ciclo olímpico, para unos Juegos Olímpicos, aunque el béisbol no esté incluido en París 2024.

“Transitaremos por juegos multidisciplinarios y clasificatorios para estos. Como sabemos, en 2023, serán los Centroamericanos y del Caribe, y los Panamericanos.

“Por eso es esta proyección, porque no tomaremos medidas para un ciclo. Queremos que perduren en el tiempo. Entonces, hablamos de que ese director debe ser nombrado para un ciclo, lo cual no se debe malinterpretar.

“Hemos escuchado en programas con criterio, no solo de la población sino también de especialistas como narradores deportivos, periodistas, que han dicho: '¿cómo un director para cuatro años?' Sí, para cuatro años, pero será evaluado anualmente. No quiere decir que no pueda ser sustituido en caso de que no cumpla su rol.

“Ya tenemos un estudio y un acercamiento de cuáles serían los directores indicados. Pensamos que la propuesta final quede entre tres o cuatro. Elegiremos a partir de la evaluación que se ha hecho de ellos.

“En esa elección primará el resultado deportivo, rendimiento, conducción del plantel, preparación, capacitación, formación científica académica, experiencia...

“Hay una serie de elementos a tener en cuenta, es decir, no estamos improvisando. Hacemos cosas sobre bases científicas y, a la vez, somos justos con nuestro pueblo, béisbol y entrenadores”.

Germán Mesa, gloria deportiva que coordina la categoría de mayores. Foto:Boris Luis Cabrera/Cubadebate.

–Aclarado el tema del director, ¿cómo se desarrollará la integración de las preselecciones nacionales y cómo serán llamados los jugadores a estas nóminas?

–Es otro punto interesante. Históricamente, ha existido una forma de seleccionar a los atletas. Lo que nosotros hemos hecho es enriquecer la comisión técnica de béisbol, la cual todavía se está desarrollando.

“Nos hemos dado a la tarea de fortalecerla. Hoy tiene un jefe técnico, un responsable de la Serie Nacional y un coordinador entre la comisión técnica y la categoría de mayores.

“Esta comisión técnica se desglosa en diferentes niveles. Tenemos un coordinador de la categoría mayores, Germán Mesa, quien trabaja con nosotros, y junto a él una serie de chequeadores. Estos últimos no son solos trabajadores de la escuela nacional y de la comisión, sino que forman un colectivo técnico que labora en cada estadio y cada partido que se desarrolla en Cuba. Pero, a la vez, implementa protocolos de evaluación a los atletas que están en la serie.

“Los equipos son responsables de realizar un despacho de la preparación vía online. Un reporte de cómo van sus atletas y entrenamiento. Luego, en un momento determinado, haremos un intercambio, una exposición de cómo va ese chequeo.

“También, los protocolos se han enriquecido con el Strike Zone, el scauting, los que se están aplicando en todos los conjuntos de Cuba.

“Existe un grupo de trabajo, el cual fue capacitado antes de la Serie y ha funcionado bien. Al inicio, arrancamos con algunas irregularidades, pero el StrikeZone ha funcionado, al igual que el scaut. Esta herramienta nos da, lanzamiento a lanzamiento, lo que hacen nuestros pícheres, los jugadores a la ofensiva y a la defensa.

“Ese estudio permitirá hacer una selección acorde con el equipo Cuba que queremos constituir, del cual formará parte el director cuando sea seleccionado.

“No es que decidirá el grupo de atletas con los que trabajará, porque se ha malinterpretado lo que hemos dicho. Él formará parte de ese colectivo de dirección que elegirá a los jugadores.

También hemos decidido tener líderes por posiciones: lanzador- receptor, jugadores de cuadro, jardineros; quienes evaluarán las diversas áreas.

“De igual forma, no podemos dejar de mencionar el programa de talentos que ha rectorado el profesor Frangel Reynaldo, el cual se está convirtiendo en un proyecto. Además, durante la temporada se estudiarán atletas que están dentro y fuera de la serie”.

Lanzador Liván Moinelo. Foto: Halcones del SoftBank.

–Los contratados, ¿cómo se irán incorporando al equipo Cuba?, ¿cómo se tendrán en cuenta?

–Existe una cantidad de contratados por la FCB, que cuando lo solicitan y lo podemos potenciar, llevan una aprobación de cada provincia.

“Por ejemplo, los que están en Japón juegan en una liga, la cual no le permite participar en la Serie Nacional, pero su torneo termina a finales de noviembre. Entonces, podrán ser reinsertados.

“Ese es el caso de los que lleguen a la final. Los que no, terminarán antes, y podrán jugar la selectiva o liga de élite cubana.

“Además, para los eventos internacionales que están programados en 2023, como el clásico mundial, en marzo; los Juegos Centroamericanos, en mayo, y los Panamericanos, en noviembre; ya existe un convenio con los atletas que tienen más de un año de contrato, y los tendremos en cuenta para los principales eventos.

“Los que tienen tres y seis años, se ha conveniado con sus ligas la participación representando a Cuba en competencias fundamentales.

“Existen otros circuitos, como México, Venezuela, Dominicana, Nicaragua y Panamá, que nos han pedido atletas. Eso ha sido autorizado por las provincias de los peloteros.

“Ya unos cuantos han sido liberados. En algunos casos, se ha visto si los van a liberar durante la Serie Nacional. Otro grupo se incorporará a la serie al terminar su liga, y muchos ya la están jugando.

“Todo atleta, que esté contratado se debe reincorporar antes del juego 60. Además, tendrá que acumular 40 turnos al bate o 20 inning, si es lanzador.

“Como previmos hay otros jugadores que están puestos en el listado, que no están contratados por nosotros y que han sido reincorporados poco a poco al sistema deportivo cubano. Igualmente, estos peloteros están jugando, como Drake y Arruebarrena. En lo que queda de campeonato, pueden salir a participar en su evento y asistir a la final de la Serie 61”.

–¿Por qué son 40 peloteros en las nóminas y no se pueden dar altas ni bajas?

–La concepción de los 40 está dada porque en series anteriores también eran 40 peloteros. Lo que 32 peloteros eran los elegibles para jugar y ocho de reserva. Esos 32 y ocho siempre había que declararlos antes del inicio de la campaña. El último día para hacerlo era el del congresillo técnico.

“Con los ocho de reserva existía una diferenciación en cuanto al salario, pero también recibían uno. En distintos momentos de la Serie, en el juego 30 o 60, se podían dar altas y bajas, pero del propio listado de las ocho reservas.

“Otra variante fue la de 34 peloteros y once reservas que llegaban a 45, pero que estaban fuera de la política salarial y quedaban cinco sin cobrar. Nada más que estaban aprobados 40.

“Eso tampoco fue efectivo, creaba un problema. De igual manera, eran declarados el día del congresillo. Eso siempre se debe hacer así, da organización y respeto a la liga.

“Para esta temporada accedimos a que fuesen 40 peloteros, no 32, ni reserva. Los 40 son elegibles. En cualquier momento de la serie, cualquier partido, están aptos para jugar los 40.

Por eso no hay altas ni bajas. Como es lógico no hay necesidad, porque estos 40 peloteros están protegidos por un contrato, están recibiendo un salario y, además, tienen el vestuario en la mano.

“En un estudio que presentamos en una conferencia de prensa, demostramos que en la Serie 60, unos 13 peloteros por equipos estuvieron prácticamente sin jugar.

“De todos los elegibles existieron cerca de 75 peloteros que tuvieron menos de 25 turnos al bate, y 106 pícheres con menos de 20 entradas de actuación en una Serie de 75 partidos. Así se comprobó que a la mayoría de los conjuntos con 27 peloteros le es suficiente para jugar, y la lista es de 40.

“No es necesario seguir inscribiendo jugadores después de la cifra de 40. Pueden perder algunos en la Serie, pueden quedarse con 35, y todavía tienen peloteros que no van a tener casi turnos al bate.

“Por otra parte, los equipos se tienen que preocupar porque cada jugador tenga un contrato para jugar la Serie, el cual debe respetar durante la campaña.

“Las provincias tienen que estar pendientes de la atención a los atletas, porque transiten en la Serie. Los tienen que proteger, hacer con tiempo una preselección adecuada, tratar de conveniar con antelación con los peloteros que estén fuera del país y que se quieran reinsertar.

“Además, tienen que conveniarlo con tiempo con sus ligas, organizarse y tenerlo en su listado. Como hemos apreciado muy pocas provincias, o casi ninguna, ha negociado con esos peloteros para que estén en sus nóminas.

“En la actualidad, lo vemos en los propios listados, y tampoco hay manifestación de otros que se quieran incorporar.

“Solo podrá haber altas y bajas para aquellos jugadores que participen en compromisos internacionales de sus diferentes categorías, por ejemplo, sub-23, sub-18.

“Igualmente, los atletas que están contratados en el exterior por la Federación, sus provincias emitieron un documento en el que están de acuerdo que salgan a jugar a otras y, por tanto, los protegemos sobre la base de que se les puede dar altas y bajas”.