El equipo Cuba sub 23 que participa en el torneo Panamericano de Aguascalientes, México, cayó en la gran final ante los anfitriones con marcador de 4-0, y se tuvo que conformar con la medalla de plata.

Jordan Suárez ofreció un recital desde el montículo azteca para dejar dormida la artillería antillana, que vino anotarse sus primeros imparables a la altura del sexto episodio.

En un trayecto de 5.1 entradas el diestro apenas aceptó un par de sencillos mientras boleaba a un rival y ponchada a dos, para acreditarse su segundo triunfo de este evento y encaramar a su tropa en lo más alto del podio por primera vez en esas lides.

No pudo el zurdo Oscar Hernández sostenerse mucho tiempo en el box y fue expulsado en el tercer inning cuando los aztecas le habían fabricado tres anotaciones, una de ellas sucia, suficientes para mantener su invito en esta competencia continental.

Los discípulos de José Enrique Reyes conectaron un total de ocho indiscutibles y, aunque dejaron a nueve corredores fríos en las almohadillas durante todo el choque, el ataque fue suficiente para liquidar a sus contrarios.

Por los ganadores, Carlos Armando Pacheco fue el único que logró apuntarse un par de imparables con una carrera impulsada, y la dupla de Javier Guadalupe y Christopher Escarrega pegaron hits remolcadores.

El avezado timonel de los cubanos, Armando Johnson, utilizó un total de cuatro relevistas que hicieron un buen trabajo de contención, pero la remontada nunca llegó, a pesar de una escaramuza a la hora del cierre que no fructificó.

No obstante esta derrota, los nacionales lograron su clasificación para el campeonato mundial de este mismo año en Taipéi de China, por lo que su labor por aquellas tierras se puede catalogar de muy aceptable, al caer con el que demostró ser el mejor equipo del torneo desde la primera jornada de competencia.

La escuadra de Nicaragua venció 4-3 a su similar de Venezuela y se agenció la medalla de bronce, ambos también con el boleto asegurado para la cita mundialista.